Hay un momento en la vida de cada uno, cuando el alma ya ha tocado tu puerta, en la que sientes que ella y tú tenéis vuestro propio recorrido.


Ya no te vale abrigarte a  la sombra de otro objetivo de alguien al que tal vez puede o pudo ser un referente válido en el pasado.


Aunque haya caminos y compartires comunes y paralelos, tu alma, que es única, te pide un sendero también único, lo que lleva (felizmente, ja,ja,ja...) a que des el paso de ser profundamente independiente y libre para que sea...


JUSTO LO QUE TÚ NECESITAS.